la escena de apertura de las Carreras de Ascott en el músical "My Fair Lady" resulta la excusa perfecta para admitir que su diseñador artístico y creador de su innovador vestuario, Cecile Beaton, afirmase que la película erá obra suya y no de su director: el famoso George cukor con quien tuvo grandes desavenencias durante la filmación. Una de ellas se produjo durante el famóso posado de la protagonista ante la cámara de Beaton:"Hice varias fotografías de Ms. Hepburn, con su propio vestuario y el de otros actores. A Cukor le pareció que no era el momento ni el lugar, aunque lo era. No quería que su estrella estuviera cansada, que no lo estaba. Si lo consideró como una usurpación de su autoridad o no, es algo que nunca vi claro. Estaba enfadado, y en aquella medida de fuerzas salió como el ganador; Ms. Hepburn no tuvo más remedio que ponerse de su parte. Pero yo hice las fotos. Ms. Hepburn era una modelo ideal. Conseguí convencerla para que se quitase el pesado maquillaje de los ojos y desarrollamos lo que ella llamó su aspecto flamenco".
El aspecto ¿flamenco? de Audrey.
Resultaría sin embargo injusto para su director suscribir esta afirmación hasta el final pero si afirmaremos que sin su trabajo la película no hubiera sido la misma.
Audrey + Beaton = Elegancia
Es esta, para mi, la escena donde el genio del diseñador brilla con mas fuerza y, sin duda, es mi favorita.... Nunca los extravagantes sombreros de Ascott han sido tan extrañamente elegantes.
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